El Castillo de Loarre, es un castillo románico, construido en el siglo XI por orden del rey Sancho III. Se encuentra ubicado en la provincia de Huesca, a unos 30 km de la capital oscense.
Al encontrarse en muy buen estado de conservación, este castillo es considerado uno de los mejores ejemplos de arquitectura militar y civil del románico de España e incluso, la fortaleza románica mejor conservada de Europa. Ha sido denominado Monumento Nacional y también Bien de interés cultural y en la actualidad se está trabajando para que la Unesco lo declare Patrimonio de la Humanidad.
Este fascinante castillo proporcionaba enormes ventajas defensivas ya que, además de estar rodeado por una muralla con torreones, se alza sobre un vasto promontorio.
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Los elementos arquitectónicos más destacados de este precioso castillo son los siguientes:
El recinto amurallado
Se construyó en 1287. La muralla abarca unos 10.000 m² y tiene un perímetro de 172 metros. Está dotada con once torreones semicirculares, a excepción de uno, que tiene forma rectangular.
La puerta de entrada
Es de estilo románico con decoración en el tímpano. Tras ella se abre una imponente escalera cubierta por una bóveda de cañón y adornada con una cenefa de ajedrezado jaqués.
Si nos fijamos, los peldaños de la escalinata forman tres calzadas, una mayor central y dos más pequeñas laterales. Se cree que su objetivo pudiera ser el drenaje del agua por la calzada central.
A cada lado de la escalera encontramos las siguientes estancias:
- El cuerpo de guardia: Entrando, a mano izquierda.
- La Cripta de Santa Quintería: Entrando, a mano derecha. Fue lugar de enterramientos y posee una increíble acústica.
La Bodega
Es la zona más fría del castillo. Al haberse encontrado en este lugar huesos humanos y algunos utensilios metálicos, se cree que, en época posterior, en la edad Media, la bodega fue utilizada como una pequeña prisión.
La iglesia de San Pedro
Es una iglesia románica del siglo XI que presenta varias diferencias llamativas en relación con el resto de las iglesias de esa época, entre las que destacan las siguientes:
- Esta iglesia no tiene planta de cruz latina, que es lo habitual, sino más bien tiene una sola nave.
- Entre el ábside y la nave se abre una cúpula de 26 metros de altura. El hecho de que una iglesia cuente con una cúpula es más característico del gótico y no del estilo románico.
Las ventanas de esta iglesia están cubiertas, en vez de por vidrieras, por alabastro, el cual también permite pasar los rayos de luz.
Su ábside semicircular está decorado con trece columnas adosadas a los muros con capiteles tallados. Al parecer el número trece representa a los miembros que estuvieron presentes en la última cena.
Los pabellones del monasterio
Este monasterio tenía tres plantas. La parte que se encuentra más al fondo era la habitación del Abad.
La sala de armas
Una de sus paredes cuenta con dos ventanas saeteras, a través de las cuales se puede divisar las tierras de la Hoya de Huesca.
El torreón de la Reina
Esta torre del siglo XI está dividida en tres plantas y da paso a la torre del homenaje. Se sitúa junto a la puerta de acceso al castillo antiguo, protegiendo el mismo.
En la parte más alta de la torre encontramos una serie de ventanales geminados, los cuales le dan a la torre un toque de elegancia.
La torre del homenaje
Se trata de la antigua torre albarrana. Es una de las torres militares mejor conservadas de siglo XI. Está dividida en cinco plantas y tiene una altura de 22 metros. Está comunicada con el castillo por un puente levadizo
El patio de armas
Este patio data también del siglo XI.
Desde este patio se puede acceder a las ruinas del antiguo palacio real, con su mirador de la reina.
El aljibe
Los aljibes servían para recoger el agua de la lluvia. Éstos eran muy importantes ya que, en caso de asedio, si no tenían almacenada suficiente agua, eran más débiles ante sus enemigos. En el caso del aljibe del Castillo de Loarre, tenía una capacidad para guardar hasta 8.000 litros de agua.
La iglesia de Santa María de Valverde
Fue la primera capilla de la fortaleza, construida por Sancho III. El primitivo ábside quedó oculto cuando se construyó la iglesia de San Pedro. Se accede a esta iglesia desde el ya mencionado patio de armas.
Esperamos que hayas disfrutado visitando virtualmente el espectacular castillo de Loarre, primero palacio real, más tarde monasterio y, actualmente, escenario de películas.