Los pueblos más bonitos de Alemania

Los pueblos más bonitos de Alemania. Quedlinburg

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Alemania es un país lleno de pueblos de cuento. Pueblos que son unas auténticas joyas escondidas entre ríos y colinas.

Aunque estos pueblos estén repartidos por varias regiones diferentes, todos ellos comparten una esencia común: Pueblos medievales, arquitectura entramada, ambiente tranquilo, castillos, ríos y paisajes bucólicos.

A continuación te contamos cuáles son los pueblos más bonitos de Alemania.

Rothenburg ob der Tauber

En nuestro número uno en la lista de los pueblos más bonitos de Alemania, no podía estar otro, Rothenburg ob der Tauber.

Se encuentra en el estado de Baviera, en el sur de Alemania y forma parte de la famosa Ruta Romántica.

Rothenburg ob der Tauber es de esos pueblos que enamoran. Sus murallas medievales, sus torres defensivas, sus calles empedradas, sus casas entramadas… crean una atmósfera que recuerdan a un cuento medieval.

Uno de los lugares más fotografiados de este lugar es Plönlein, un rincón lleno de encanto donde una casa amarilla separa dos calles empedradas, con dos torres medievales al fondo.

Monschau

Monschau, otro de los pueblos más bonitos de Alemania, se encuentra en el oeste del país, muy cerca de la frontera con Bélgica, dentro del Parque Natural de Eifel.

Rodeado de colinas boscosas y atravesado por el río Rur, este pequeño pueblo de cuento parece haberse quedado detenido en el tiempo.

Este pueblo, considerado como uno de los pueblos más fotogénicos y pintorescos del país, posee un casco histórico, muy compacto y muy bien conservado, repleto de casas entramadas perfectamente alineadas junto al río Rur.

Si quieres sacar una foto panorámica del lugar, puedes subir al castillo de Monschau, situado en lo alto de una colina. Desde allí obtendrás las mejores vistas de Monschau.

Monreal, uno de los pueblos más bonitos de Alemania

En el oeste de Alemania, en la región del Eifel, muy cerquita del valle del Mosela, tenemos una preciosidad de pueblo: Monreal.

Monreal es uno de esos pueblos que parecen sacados de un libro ilustrado. Muy pequeñito, silencioso y rodeado de colinas verdes.

Además de sus casas entramadas perfectamente conservadas y el río que atraviesa el pueblo, la presencia de dos castillos en ruinas que coronan el paisaje, le dan a Monreal un encanto fotográfico espectacular.

En definitiva, Monreal un pueblito súper tranquilo y encantador que perece muchísimo la pena conocer.

Bernkastel – Kues

En el oeste de Alemania, en pleno valle del Mosela, podemos visitar Bernkastel-Kues, un pueblito situado a orillas del río y rodeado de colinas cubiertas de viñedos.

Su centro histórico está perfectamente conservado, con estrechas calles empedradas y con casas entramadas del siglo XV.

Recomendamos hacer una parada en la bonita plaza del Mercado (Marktplatz)

Dominando todo el pueblo, en lo alto de una colina, se encuentra el Castillo Landshut. Muy recomendable subir hasta aquí para tener unas fantásticas vistas del río Mosela.

Bernkastel-Kues ofrece también muchas otras actividades como visitar sus bodegas y degustar el vino local o hacer una ruta en barco por el Mosela.

Cochem

Este pueblo, al igual que el anterior, también se encuentra en el oeste de Alemania, a orillas del río Mosela.

El valle del río Mosela es una región famosa por sus viñedos en terrazas, castillos de cuento y pequeños pueblos medievales. De todos ellos, Cochem es uno de los más bonitos de este valle e incluso también está considerado como uno de los pueblos más bonitos de Alemania.

El lugar más icónico de Cochem es el castillo de Reichsburg.   

Este castillo con murallas y torres puntiagudas, está situado en lo alto de una colina y ofrece vistas espectaculares del Mosela y del casco antiguo.

Cochem tiene un centro histórico pequeño, pero lleno de encanto, con casas entramadas muy bien conservadas.

Muy agradable pasear tanto por sus calles como por el paseo que hay junto al río.

Bacharach

Bacharach es uno de esos pueblos que parecen detenidos en el tiempo.

Situado en pleno Valle del Rin Medio y declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, Bacharach es un destino perfecto para quienes buscan la esencia más pura del paisaje romántico alemán: casas entramadas, torres medievales, murallas muy bien conservadas y un castillo vigilando desde lo alto entre viñedos.

Schwabisch Hall

En el suroeste de Alemania, a unos 60 km de Stuttgart, se encuentra este histórico y elegante pueblo: Schwabish Hall.

En el corazón del pueblo, se encuentra Marktplatz que es una de las plazas más bonitas de Alemania, donde su elemento más destacado es la escalinata monumental de la iglesia de San Miguel

Schwabisch Hall, una de las joyas ocultas del sur de Alemania, quizás algo alejada de las típicas rutas más turísticas.

Vistas de Schwabisch Hall, con el río Kocher en primer plano.

Quedlinburg

En el centro-este de Alemania, en la región de los montes del Harz, se encuentra uno de los pueblos más bonitos de Alemania, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Sus más de 1.300 casas entramadas, construidas a lo largo de seis siglos, hacen que el centro histórico de Quedlinburg sea excepcional.

Recorrer sus calles adoquinadas, que serpentean entre edificios medievales, es algo muy recomendable.

En lo alto del pueblo se alza el conjunto del Schlossberg, formado por la iglesia colegiata de San Servacio y los edificios de la antigua abadía. Desde aquí se obtienen las mejores vistas del casco medieval.

Fotografía de A. Savin – Wikimedia.

Dinkelsbühl

En el sur de Alemania, en el estado de Baviera, se encuentra Dinkelsbühl, un coqueto pueblo que forma parte de la famosa Ruta Romántica y que está considerado como uno de los pueblos más bonitos de Alemania.

Este pueblo medieval conserva intacta su atmósfera del siglo XV: murallas completas, puertas fortificadas, casas de colores con tejados inclinados y un ambiente tranquilo.

Dinkelsbühl es uno de los pocos pueblos alemanes que conserva toda su muralla original. Puedes recorrerla caminando y pasar por sus puertas históricas.

Nördlingen

Este pueblo, al igual que el anterior, se encuentra en el sur de Alemania, en Baviera y también forma parte de la Ruta Romántica.

Tiene la peculiaridad de estar levantado dentro de un cráter de meteorito. La verdad es que, cuando fuimos nosotros, este hecho no lo apreciamos.

Su casco histórico está completamente rodeado por murallas medievales que se conservan intactas. Puedes subir, de forma gratuita, a lo alto de las murallas y desde allí admirar la arquitectura medieval de este bonito pueblo.

Mittenwald

Continuando con el sur de Alemania, en Baviera, muy cerquita de la frontera con Austria y rodeado de los Alpes bávaros, se encuentra este bonito pueblo de montaña, Mittenwald.

Esta joya bávara es famosa por sus coloridas casas, con frescos en sus fachadas que representan escenas históricas, religiosas o de la vida rural.

También este pueblo alpino es famoso por su tradición musical y artesanal, ya que cuenta con talleres dedicados a la fabricación tradicional de violines y otros instrumentos de cuerda.

Sin duda, merece la pena visitar Mittenwald, uno de los pueblos más bonitos de Alemania, lleno de color y rodeado de unos paisajes alpinos espectaculares.

Fotografía de Joshua Kettle en Unsplash.

Wernigerode

En el norte de Alemania, encontrarás Wernigerode, también conocida como la “Ciudad de los Cuentos”.

Y es que su casco histórico, con calles empedradas y con casas entramadas, con fachadas pintadas de vivos colores, hacen que este pueblo parezca sacado de un cuento.

Dominando la Plaza del Mercado, se encuentra el Ayuntamiento, un precioso edificio de estilo gótico-renacentista, con una fachada muy pintoresca.

Wernigerode cuenta también con un imponente castillo romántico del siglo XIX, reconstruido sobre una fortaleza medieval.

El Ayuntamiento en la Plaza del Mercado. Fotografía de Timothy Kindrachuk en Unsplash.

Hamelin

Hasta ahora hemos visto coquetos pueblos que parecen sacados de un cuento. Así que, para concluir hablaremos de algo totalmente diferente. De un cuento que salió de un pueblo: Hamelín.

Y es que, en este pueblo, en Hamelín, la leyenda del Flautista ha dejado su huella en cada rincón.

Sus calles medievales y sus casas entramadas recuerdan la historia del Flautista, creando un ambiente donde la leyenda y la realidad se entrelazan.

Si dispones de mucho tiempo, otros pueblos interesantes que también puedes visitar son los siguiente:

  • Meersburg: Junto al lago Constanza.
  • Triberg: Pueblo típico de la Selva Negra, famoso por sus relojes de cuco.
  • Füssen: Ubicado al lado de los dos castillos más famosos de Alemania. El Castillo de Neuschwanstein y el Castillo de Hohenschwangau.
  • Gegenbach: Pueblo medieval con mucho encanto, ubicado en las inmediaciones de la Selva Negra.

Esperamos que te haya gustado nuestro artículo sobre los pueblos más bonitos de Alemania. Unos pueblos que, no solo muestran lo mejor del país, sino que invitan a viajar sin prisas, a disfrutar de lo auténtico y a descubrir rincones donde el tiempo parece haberse detenido.

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