La letra de una conocida canción dice que Sevilla tiene un color especial. Un color especial proporcionado por sus monumentos, por la alegría de su gente, por el cante flamenco y por sus exquisitas tapas.
La capital de Andalucía, Sevilla, es una de las ciudades más fascinantes de España que, cuando la visites, te cautivará.
A continuación, os indicamos qué ver en Sevilla, una ciudad con un color especial.
El Real Alcázar de Sevilla
En el centro de Sevilla, justo en frente de la catedral, podemos visitar este conjunto palaciego amurallado, construido en diferentes etapas históricas, de ahí que puedas encontrar en él una gran mezcla de estilos arquitectónicos, como por ejemplo, mudéjar, gótico, renacentista o barroco.
El palacio original se construyó en la Alta Edad Media y en la actualidad es la residencia de los miembros de la familia real española cuando visitan la ciudad. Esto lo convierte en el palacio real en uso más antiguo de Europa.
Este interesante palacio, con siglos de historia a sus espaldas, ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
El real alcázar alberga diferentes estancias, en las que se puede apreciar la fusión de culturas que han pasado por Sevilla. Entre sus estancias podemos destacar las siguientes:
La Puerta del León
Situada en la muralla exterior, esta puerta supone la principal vía de acceso al recinto. Su nombre es debido al mural de azulejos donde aparece representado un león.
El palacio mudéjar o de Pedro I
Fue construido en el siglo XIV, por iniciativa del rey Pedro I. Sus bóvedas, arcos, azulejos y materiales respiran un auténtico estilo mudéjar.
Salón de Embajadores
Es el lugar más suntuoso del palacio.
Destaca su preciosa cúpula semiesférica de color dorada. Esta cúpula, de madera labrada, fue realizada en 1427 por Diego Ruiz. Posteriormente, en el siglo XIX, se le añadieron espejos.
Patio de las Doncellas
Se trata de un patio rectangular rodeado por cuatro galerías con arcos lobulados. En el centro podemos observar un estanque. Este patio posee además unos bellísimos zócalos de azulejos.
El Patio de las Muñecas
Este patio cuenta con una interesante colección de capiteles. Se cree que esta estancia estaba destinada a la reina. Hay varias hipótesis sobre el origen de su nombre, aunque la más plausible es por los rostros de niñas o muñecas que hay al comienzo de los arcos.
La Catedral
Es el templo católico de estilo gótico más grande del mundo y fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987.
Su construcción comenzó en el siglo XV y se necesitaron más de 80 años para poder finalizar las obras. La edificación se realizó en el solar que quedó tras la demolición de la antigua mezquita de Sevilla.
Entre las maravillas artísticas que existen en el interior de la catedral, destacan los lienzos de Murillo, Goya y Zurbarán y el sepulcro de Cristóbal Colón.
La Giralda
Como ya hemos mencionado antes, la catedral está sita en el solar que ocupaba la antigua mezquita de Sevilla. Esta mezquita fue totalmente demolida, a excepción de su alminar y su patio.
La Giralda es el nombre que recibe la torre campanario de la catedral. Su parte inferior corresponde a ese alminar, de finales del siglo XII, en la época almohade, mientras que su parte superior pertenece al siglo XVI, de época cristiana.
Se puede subir a lo alto de la torre. Las vistas que se obtienen desde sus casi 100 metros de altura son alucinantes.
El Patio de los Naranjos
Este espacio ajardinado, herencia de la antigua mezquita almohade, se encuentra totalmente integrado en la estructura de la catedral.
Una de las puertas de acceso a este patio es la Puerta del Perdón, que era la entrada a la ya citada mezquita.
En el centro de este patio podemos encontrar una pequeña fuente.
Nosotros visitamos Sevilla durante el mes de diciembre, así que los naranjos estaban en todo su esplendor, llenos de naranjas, dándole al patio un bello color.
El Archivo General de Indias
Muy próximo a la catedral, podemos encontrar este edificio, creado en 1785 por iniciativa del rey Carlos III, con el fin de centralizar toda la documentación referente a la administración de los territorios de ultramar. De hecho, presume con orgullo de ser el mayor archivo sobre la actividad de España en América y Filipinas.
Se trata de un edificio de dos plantas, que cuenta con un patio central y con una fachada que combina elementos de piedra con ladrillos rojos.
Al igual que la catedral y el Real Alcázar, el archivo de Indias también ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
La Plaza del Cabildo
Aunque esta hermosa plaza se encuentra en el corazón de Sevilla, justo al lado de la catedral, pudiera resultar un poquito lioso llegar hasta ella, ya que se accede a través de un pasaje.
Se trata de una plaza con forma semicircular, rodeada por una serie de arcadas decoradas con frescos, con una pequeña fuente en su interior.
A nosotros nos gustó mucho este lugar y nos sorprendió la tranquilidad que se respiraba en comparación con las bulliciosas calles que la bordean.
El Palacio arzobispal
Si visitas la catedral de Sevilla, concretamente si te encuentras observando la Giralda, seguro que te llamará la atención el edificio que se encuentra a tu derecha.
Se trata del palacio arzobispal de Sevilla, el cual ha sido declarado Monumento Histórico Artístico en el año 1969.
Destaca su portada, construida en el siglo XVIII, que está considerada como una de las mejores del barroco sevillano.
Las murallas de Sevilla
Estas murallas fueron unas cercas militares que rodeaban el casco histórico de Sevilla. Esta ciudad ha tenido, a lo largo de los siglos, diferentes recintos amurallados pero los que se conservan en la actualidad pertenecen al siglo XII, realizados por los almohades.
De las 18 puertas de acceso que existían, hoy en día permanecen en pie solamente cuatro.
El Hospital de los Venerables Sacerdotes
Este edificio, construido en el siglo XVII en un estilo barroco, sirvió como residencia de sacerdotes. Sin embargo, hoy en día, tiene una función muy distinta, albergar el Centro Velázquez, que como su propio nombre indica, está dedicado al célebre pintor Diego Velázquez.
El barrio de Santa Cruz
En el corazón del casco histórico de Sevilla, donde antiguamente se encontraba el barrio judío, podemos recorrer un conjunto de laberínticas callejuelas, que constituyen el popular barrio de Santa Cruz.
Te recomendamos dejarte llevar y deambular sin rumbo fijo por sus estrechas calles, descubriendo rincones llenos de encanto, plazas llenas de naranjos y locales donde poder disfrutar de unas buenas tapas.
Además de los muchos lugares arriba mencionados, también se encuentra en este pintoresco barrio, el Balcón de Rosina. En la Plaza de Alfaro, justo en el edificio que hace esquina, podemos admirar este hermoso balcón, famoso no solo por su indiscutible belleza sino también por la leyenda que existe sobre él. Según cuenta la leyenda este romántico balcón inspiró la ópera “El barbero de Sevilla”.
La Plaza de toros de la Real Maestranza
Esta plaza fue construida en el siglo XVIII, en un estilo barroco. Su entrada principal cuenta con un gran arco de medio punto, con dos columnas a sus flancos y sobre ellas un balcón con remate de frontón.
Además de celebrarse aquí las corridas de toros, especialmente durante la Feria de Abril, esta plaza también ha sido utilizada como escenario cinematográfico. Por ejemplo, los actores Tom Cruise y Cameron Díaz estuvieron en esta plaza rodando la película “Noche y día”.
Las Setas de Sevilla
Las Setas de Sevilla, originalmente llamadas “Metropol Parasol”, fueron construidas en el año 2011 y, desde entonces, se han consolidado como una de las principales atracciones turísticas de la capital sevillana.
Su arquitectura vanguardista y con un diseño totalmente ondulado, consiste en seis parasoles de grandes dimensiones compuestos de madera laminada que descansan a 26 metros de altura sobre seis pilares cilíndricos y dos columnas de hormigón. Las partes altas de cada parasol se entrelazan entre sí, formando una única cubierta. Debido a que la silueta de esta estructura recuerda a un conjunto de setas, los ciudadanos comenzaron a llamarla “Las Setas”.
Las Setas de Sevilla cuentan también con una terraza y un mirador que ofrece una vista panorámica del casco antiguo de la ciudad.
La Casa de Pilatos
Este palacio, construido durante los siglos XV y XVI, es uno de los edificios más emblemáticos de la arquitectura civil andaluza de aquella época. Esta casa presenta una combinación de dos estilos totalmente diferentes, el renacentista italiano y el mudéjar español.
En el interior del edificio podemos visitar, entre otras cosas, sus patios y sus jardines.
La Real Fábrica de Tabacos
Si nos dirigimos hacia el sur, con la intención de visitar por ejemplo la Plaza de España, podemos aprovechar el trayecto para conocer el edificio industrial más importante de España, la Real Fábrica de Tabacos.
Este edificio fue construido en el siglo XVIII y fue la sede de la primera fábrica de tabacos de todo el continente europeo.
Se trata de un edificio de impresionantes dimensiones, rodeado por un foso que lo aísla de la ciudad.
Tiene la calificación de Bien de Interés Cultural y desde mediados del siglo XX este edificio alberga algunas facultades de la Universidad de Sevilla.
El Teatro Lope de Vega
Muy cerquita de la Real Fábrica de Tabacos, podemos visitar uno de los espacios culturales más representativos de Sevilla, el teatro Lope de Vega.
El edificio fue construido en el año 1929, en un estilo neobarroco. Dispone de un gran salón de fiestas, conocido como el “Casino de la Exposición”. Fue construido para ser el pabellón de Sevilla en la Exposición Iberoamericana, que se celebró ese mismo año.
En la actualidad, dentro de su amplio programa cultural, podemos disfrutar de conciertos de música, obras de teatro, de flamenco, de danza…
La Plaza de España
Uno de los lugares que más turistas recibe es, sin lugar a dudas, la Plaza de España. Y la verdad es que, no es de extrañar, a nosotros nos gustó muchísimo.
Esta coqueta plaza, de imponentes dimensiones, fue levantada en 1929 para la, ya mencionada, Exposición Iberoamericana.
Es digno de admiración los coloridos azulejos de sus bancos, donde aparecen representadas cada una de las provincias de España.
Resulta gracioso ver cómo, prácticamente todos los turistas, buscan la suya para poder sacarse allí una fotografía. Nosotros, evidentemente, buscamos la nuestra: Navarra.
El elemento más destacado de esta plaza es su elegante edificio semicircular que la abraza, de ladrillo caravista. Cuenta con dos torres de 74 metros de altura en cada uno de sus extremos.
En la plaza también podemos encontrar una fuente central y cuatro puentes que representan los cuatro antiguos reinos de España. Estos puentes te permiten atravesar el canal que bordea la plaza.
El Parque de María Luisa
Una vez visitada la Plaza de España, un buen plan sería dirigirnos al principal pulmón verde de la ciudad, el exuberante parque de María Luisa.
Este romántico parque cuenta con diversas fuentes, estanques, monumentos que bien merecen la pena conocer. A continuación, os indicamos algunos de estos rincones.
El Estanque de los Lotos
Este lugar cuenta con un estanque rectangular, repleto de patos y cisnes. Alrededor del estanque hay pérgolas con plantas trepadoras y enredaderas, bajo las cuales puedes descansar sosegadamente, sentándote en uno de sus bancos.
La Fuente de las Ranas
Esta fuente data del año 1914 lo que la convierte en la fuente más antigua de todo el recinto.
En el centro de la fuente, hay un pato apoyado sobre una tortuga y alrededor del estanque, ocho ranitas. De ahí el nombre de la fuente.
El Jardín de los Leones
Este jardín, también conocido como fuente de los Leones, data de 1928. Se trata de una fuente, decorada con azulejos, rodeada por unos leones sosteniendo escudos.
Monte Gurugú
Otra obra decorativa del parque de María Luisa es el monte Gurugú. Se trata de un pequeño montículo lleno de vegetación, con una llamativa cascada de agua y unas escaleras que te conducen arriba del todo, donde podrás disfrutar de unas bonitas vistas del parque.
La Torre del Oro
Se trata de una torre defensiva, de tres cuerpos, que antaño protegía Sevilla de las invasiones por el río Guadalquivir.
Fue construida durante el siglo XIII y restaurada en varias ocasiones. Hoy en día, alberga el Museo Naval de Sevilla y ha sido declarada monumento histórico-artístico.
Existen varias leyendas sobre el origen del nombre de la torre. Los reflejos dorados que producían los azulejos que la recubrían en el pasado, es una de las leyendas más aceptadas.
Sin lugar a dudas, la torre del oro es otro de los iconos de la capital sevillana que debes visitar.
El Puente de Isabel II
Este puente, conocido también como el Puente de Triana, une el centro de Sevilla con el popular barrio de Triana. Fue construido bajo el reinado de Isabel II, de ahí su nombre.
Este puente, realizado en piedra y en hierro, fue declarado Monumento Histórico Nacional y tiene la peculiaridad de ser el puente más antiguo de la ciudad.
El barrio de Triana
Cuando el sol se oculta tras el horizonte, las calles de este pintoresco barrio cobran vida. Tanto sevillanos como turistas acuden a los bares y restaurantes de la calle Betis.
Una cita ineludible si quieres disfrutar de los sabores de esta ciudad.
Estadio de fútbol Ramón Sánchez Pizjuán
Para los amantes del fútbol, una parada turística puede ser este recinto deportivo, propiedad del equipo Sevilla Fútbol Club.
Nosotros, que somos más de Osasuna (todo hay que decirlo), vinimos a visitarlo.
Arcade Planet
Después de haber pateado la capital andaluza, visitando todas sus atracciones turísticas, a continuación, os proponemos algo totalmente distinto: Visitar el Museo de Videojuegos Arcade Planet.
Si te gustan los videojuegos, si tal vez eres un poquito friki o si simplemente ya tienes unos cuantos añitos y te gustaría retroceder a tu infancia, recordando aquellas máquinas recreativas a las que solías jugar cuando eras un chaval, deberías de visitar este lugar.
Arcade Planet, ubicado en la localidad de Dos Hermanas (a unos 20 km. de Sevilla), es en la actualidad el salón de videojuegos más grande de España.
Si bien hace unas décadas los salones de máquinas recreativas abundaban por toda la geografía nacional, desde que se empezaron a popularizar las consolas domésticas fueron desapareciendo para terminar corriendo la misma suerte que los videoclubs.
En Arcade Planet podemos vivir el mismo ambiente de cuando éramos chavales en los salones recreativos y echar unas partiditas al Pacman, Spy Hunter, Street Fighter II o jugar a algunos de los pinballs míticos de Williams.
Eso sí, no hará falta que metamos monedas de 5 duros. Con la entrada podremos jugar todas las partidas que queramos sin necesidad de echar monedas.
Además de los arcades clásicos de los 80 y 90, también podemos encontrar una sección de arcades japoneses tanto clásicos como modernos como el Project Diva, que tan de moda están entre los otakus.
En definitiva, una visita obligada para los amantes de los videojuegos y para aquellos que de chavales nos dejábamos toda la paga en los salones recreativos.
Si quieres más información sobre este lugar, puedes visitar su página web: https://arcadeplanet.es/
