En el interior de la provincia de Tarragona podemos visitar Montblanc, una interesante localidad cuyo casco antiguo ha sido declarado conjunto histórico-artístico.
A continuación, te contamos que ver en Montblanc, uno de los pueblos más bonitos de Tarragona.
Murallas, un «must» que ver en Montblanc
Uno de los lugares que más nos sorprendieron de esta localidad fue las Murallas.
Montblanc se encuentra rodeada de unas murallas que se levantaron en el siglo XIV con el fin de proteger y defender a la villa.
Tienen un perímetro de casi dos kilómetros, con una treintena de torres. Los elementos más destacados de sus murallas son los siguientes:
- Torre dels Cinc Cantons: Única torre de base pentagonal situada en el noreste, en un ángulo de la muralla. Junto a la torre, se encuentra un photocall, donde te podrás sacar unas bonitas fotos con el nombre de esta localidad.
- Portal de Sant Antoni: Construido en el siglo XIV, aunque el portal actual es una reconstrucción de finales de los 90. Se trata de uno de los cuatro accesos originales a Montblanc.
- Portal de Sant Jordi: Situado en el tramo denominado muralla de Sant Jordi, es uno de los portales mejor conservados.
- Portal de Bové: Es la única torre que está construida a cuatro caras. La torre tiene matacán de defensa y fue levantada en el siglo XIV.
- Portal de Sant Francesc: Uno de los cuatro accesos originales a la villa. Fue construido en el siglo XIV, pero en el siglo XIX fue derribado para facilitar el paso de los carruajes. Así que, lo que vemos en la actualidad es una reconstrucción de este siglo XXI.
- Portal del Castlà: Este portal, también conocido como el portal de Barcelona, fue levantado en el siglo XV y cuenta con un pequeño escudo de la villa esculpido.
- Portalet del Foradot: Este portal fue abierto para permitir el acceso durante la rehabilitación de este tramo de la muralla, ubicado en la zona más alta del recinto amurallado.
Iglesia de Santa María
Esta iglesia que data del siglo XIV fue construida en el lugar donde antiguamente se encontraba una pequeña iglesia románica.
Esta iglesia no fue totalmente acabada, dado que la peste negra provocó una gran crisis económica y demográfica en la villa.
Esta iglesia de grandes dimensiones cuenta con una fachada de estilo barroco, ya que la original fue destruida durante la Guerra de los Segadores.
Iglesia de Sant Miquel
Esta iglesia que data del siglo XIII exhibe una fachada románica y cuenta con un interior de estilo gótico.
Durante el siglo XIV fue la sede de las Cortes Generales de Cataluña. Sin embargo, durante el siglo XIX la iglesia sufrió varios saqueos hasta el punto de llegar a convertirse en el siglo XX en un simple almacén.
Afortunadamente, la iglesia fue sometida a un proceso de restauración.
Convento de Sant Francesc
Construido entre los siglos XIII y XIV, este convento estaba formado por la iglesia, el claustro y las dependencias de los monjes franciscanos.
En el siglo XIX quedó en el abandono y el claustro y las otras dependencias fueros destruidos. Sin embargo, en el pasado siglo XX se rehabilitó la iglesia, que era lo que único que quedaba en pie, convirtiéndola en un centro cultural.
Antiguo hospital de Santa Magdalena
Conjunto arquitectónico compuesto por una iglesia del siglo XIV y por el edificio del hospital de los siglos XV y XVI.
El hospital se estructura alrededor de un pequeño claustro central, que cuenta con un pozo.
A lo largo de la historia se le ha dado diversos usos, siendo el actual albergar el Archivo Comarcal de la Conca de Barberà.
Plaza Mayor
Coqueta plaza empedrada que, además de conservar atractivas casas con soportales, cuenta con dos importantes edificios, la Casa Desclergue, que data del siglo XVI, y el ayuntamiento.
Un buen lugar para darse cita al tener esta plaza varios cafés.
Casal dels Josa
Muy cerquita de la iglesia de Santa María, se encuentra este interesante edificio civil que en la actualidad alberga el Museo Comarcal de la Conca de Barberà.
Calle de la Plebanía
Esta estrecha calle medieval tiene un encanto especial.
Situada dentro de la que fue el primer núcleo de la villa, conserva en parte su aspecto original, con dos arcos ojivales de piedra que unen las fachadas.
Calle dels Jueus
Otra atractiva calle del centro histórico de Montblanc, que formaba parte del antiguo barrio judío, es la calle dels Jueus.
Al igual que la calle Plevanía, esta estrecha vía también cuenta con un fotogénico arco de piedra.
Mirador Pla de Santa Bárbara
En lo alto de una pequeña colina se encontraba el castillo de Montblanc. Actualmente ya no queda nada del castillo, sino un mirador desde donde puedes tener unas vistas muy chulas de todo el pueblo.
Pont Vell
Puente que data de siglo XII. Antiguamente contaba con unos arcos en sus extremos, pero estos fueron destruidos en el siglo XIX para facilitar el paso de los carruajes.
Si quieres saber que más se puede visitar en esta provincia, te animamos a que sigas leyendo nuestro artículo sobre Tarragona.